En la explotación agrícola, el Pivote representa la mecanización que aplica el agua en forma de lluvia a los cultivos, convirtiéndose en una herramienta clave para rentabilizar las cosechas.
Por otra parte, cuanto más larga sea la vida útil del sistema, más rentable resultará la inversión que supuso su compra. Para conseguirlo, es preciso realizar un mantenimiento periódico que evite fallos de funcionamiento en campaña. En muchas ocasiones se considera que los aparatos mecanizados pivot no requieren una labor de conservación; o bien no con la asiduidad y periodicidad que el resto de maquinaria (tractores, cosechadoras o aperos de labranza).